Preceptos de la Iglesia católica

Los Preceptos de la Iglesia Católica son una descripción de los "requisitos mínimos necesarios" de los católicos.

Estos cinco preceptos pretenden garantizarnos “el mínimo necesario en el espíritu de oración y de esfuerzo moral, en el crecimiento en el amor de Dios”.

y vecino”. En otras palabras, esto es lo mínimo que debes hacer para decir que eres católico practicante. (CCC 2041)

El primer precepto es: “Asistirás a misa los domingos y días santos de precepto y descansarás de los trabajos serviles”.

En la Diócesis de Charleston, debe asistir a Misa durante un mínimo de seis meses antes de recibir un sacramento. Descansar los domingos y días festivos significa pasar al menos un tiempo con tu familia y tu comunidad cristiana.

El segundo precepto es "Confesarás tus pecados [graves] al menos una vez al año".

Sin embargo, cuando estés en estado de pecado mortal, debes confesarte para asegurarte de que eres digno de recibir la Eucaristía.

El tercer precepto es "Recibirás el sacramento de la Eucaristía al menos una vez durante el tiempo pascual".

Eso sí, se recomienda cada semana.

El cuarto precepto “Observarás los días de ayuno y abstinencia establecidos por la Iglesia” asegura que estemos adecuadamente preparados para las fiestas litúrgicas y nos ayuda a adquirir dominio sobre nuestros deseos carnales.

El quinto precepto “Ayudarás a proveer a las necesidades de la Iglesia” significa que los fieles están obligados a ayudar a las necesidades materiales de la Iglesia, cada uno según sus propias posibilidades. La Iglesia no especifica qué porcentaje de los ingresos se debe dar, pero 1 Corintios 16:2 dice: “El primer día de la semana [domingo] cada uno de vosotros aparte lo que pueda”.